Calidad es la palabra de orden, en los 40 centros escolares del municipio de Morón, en Ciego de Ávila, cuando se trata de Perfeccionamiento del proceso docente educativo.
En la céntrica Avenida de Tarafa de esta ciudad, está el seminternado de primaria Ricardo Companioni, que acoge una matrícula de 178 estudiantes de primero a sexto grados y una plantilla cubierta desde el inicio del curso de 19 docentes.
Con orgullo y satisfacción, Inés Fleites Uz, directora de ese centro, ofrece una inmediata argumentación: "Contamos con 17 docentes licenciados en Educación Primaria y de ellos, cinco son máster".
Esta escuela se presenta como una de las instalaciones más bellas de ese entorno residencial y vecinos, familiares de los estudiantes y demás factores de la comunidad les ofrecen un sistemático apoyo en todo lo posible, incluso en la participación de matutinos especiales y otras actividades.
En un pequeño recibidor, se exhibe la foto de Ricardo Companioni, un mártir de la localidad asesinado por bandas contrarrevolucionarias, y hasta allí llegan los niños para leer su biografía, conocer su historia y ser ejemplo de su legado.
En el intercambio con docentes y directivos, coinciden en que muchos vecinos quisieran poder matricular a sus hijos en este seminternado, pero las capacidades del centro no lo permiten, ya que se trata de una escuela donde confluyen muchos factores positivos que favorecen la calidad del proceso docente educativo.
Es el fruto de la constancia, dedicación, profesionalidad y consagración, todo por la educación de nuestros hijos.
Lenel Iparraguirre González
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